REJUNTE POLÍTICO EN UN NEGRO 2023

La única manera de conservar rejuntada a la coalición oficialista “Apruebo

Dignidad” que va desde el liberalismo progresista hasta la izquierda extrema, es

mediante un suculento sueldo y el prorrateo, a destajo, de diferentes cargos, inclusocreando nuevos e inservibles puestos que solo buscan el pago de favores políticos para adueñarse, además, de estratégicos enclaves del poder.

Unir, por convicciones, a gente tan inepta y diversa ideológicamente, es imposible.

Definitivamente, no los une un relato coherente ni tampoco un mismo líder. Solo fue un exitoso rejunte que les permitió ganar una elección y llegar al poder. Ocurrido lo anterior, hoy no se visualiza un programa serio ni la capacidad e idoneidad para administrarlo democráticamente. Solo adornadas frases mediáticas, recargadas de promesas que nunca se cumplirán, pero que los ilusos y un pueblo cada vez más ignorante, las cree y otros, alejados de las penurias y la escasez, las aprovecha para hacer nuevos y millonarios negocios.

Una Coalición plagada de seres que, por la carencia de mínimas competencias

específicas, solo tienen la posibilidad de continuar con lo único sobre lo cual tienen experiencia: su capacidad para esparcir el odio y movilizar el lumpen junto a los resentidos sociales que viven de los bonos del Estado, en la medida que apoyen la revolucionaria deconstrucción y el desmantelamiento de la soberanía e institucionalidad de la República de Chile.

Todo lo anterior, frente a más de ocho millones de chilenos desamparados y

abandonados por la derechita cobarde y los oportunistas amarillos políticos que en vez de celebrar el triunfo del 4 de septiembre, a espaldas de la ciudadanía y cada día con menos afiliados a sus desmembrados partidos, se unieron a la izquierda para levantar un nuevo, inconstitucional, millonario y traidor proceso constituyente. Una iniciativa sin ninguna relación ni sintonía con las urgentes necesidades sociales que nos conduce –aceleradamente– a todos, pero con excepción de la casta política y los grandes empresarios o grupos económicos, hacia un negro 2023. Un año de ahorro fiscal pero donde habrá financiamiento para conmemorar los 50 años del “Golpe Militar”. Un escenario que, con unos débiles respiros en noviembre de 2023, también pondrán a prueba la unidad de ese histórico 62% del 4 de septiembre donde,los chilenos libres, independientes, soberanos, patriotas y respetuosos de las tradiciones republicanas y que estamos hastiados de los ineptos y carísimos políticos, tendremos –nuevamente– una posibilidad cierta, pero esta vez sin medias tintas, de rescatar la República de Chile.

Entiendan, sin UNIDAD, en el caos del negro 2023, barrerán con la escasa

democracia que va quedando. No busquen la solución inmediata, tampoco la

reelección de quienes nos traicionaron, y menos, el candidato perfecto. Busquen a

quienes demuestren, con su relato, que no están al servicio de la agenda 2030 de la Organización de las Naciones Unidas, y meno, de sus socios comunistas.